Desde hace algunos años, se ha visto cómo la sociedad califica al progreso como ese estado de constante movimiento. Para muchas personas, estar ocupado es sinónimo de ser productivo, y en sus propios términos, ser exitoso. El descanso suele quedar en segundo plano hasta que el cuerpo no aguanta más y se sienten los estragos.
¿Cuántas veces has despertado en la mañana sintiendo que no descansaste a pesar de haber dormido? Atravesar el día con esta sensación tiene sus consecuencias; por ejemplo, la tendencia a irritarnos con más facilidad, menos energía, niveles bajos de productividad e incluso debilitamiento del sistema inmune. Lo peor de esta situación es que muchas personas no atribuyen estas sensaciones a la falta de sueño y por ese motivo no trabajan es solucionarlo.
Dormir bien, entendiéndose como la posibilidad de descansar apropiadamente tanto el cuerpo como la mente, tiene beneficios que en muchos casos no son conocidos, y que con la práctica diaria aportan a una mejor calidad de vida.
Se conoce por ejemplo que durante el sueño los tejidos del cuerpo se reparan y por ende se recupera la energía. Si logras descansar ocho horas al día podrás ver mejora en la memoria y humor, tu presión sanguínea bajará, notarás menos hinchazón en el cuerpo; incluso tu peso no se descontrolará ya que la parte del cerebro encargada de controlar el sueño, es la misma que regula el metabolismo, por lo que si no duermes de manera adecuada es posible que aumente tu apetito.
El número de horas que debemos dedicar al descanso varían en función de la edad; en el caso de los adultos debería ser entre siete y nueve horas. Para hacerlo correctamente existen algunos rituales que debes seguir; por ejemplo, regular la luz del dormitorio, dejar de lado tu celular u otro equipo tecnológico ya que emiten una luz que altera el ciclo del sueño. Mantener un horario para dormir, cenar temprano, hacer ejercicio y no abusar de bebidas estimulantes son algunos consejos más.
Otro aspecto importante que debes tomar en cuenta, y que muchas veces no resulta obvio, es la indumentaria que utilizas al dormir, así como el lugar donde reposa tu cuerpo y descansa tu cabeza. Invertir en estos implementos es fundamental; se debe aprovechar que actualmente existe la posibilidad de adquirir colchones y almohadas diseñadas para una infinidad de gustos y situaciones, tanto que puedes sentir que son hechos a la medida.
Chaide ofrece una variada oferta diseñada para todo tipo de necesidad; entre sus productos puedes seleccionar almohadas y colchones de varios materiales y usos. Esta marca se ha mantenido a la vanguardia en cuanto a los procesos de producción y las soluciones que aporta a sus consumidores.
Definitivamente, dormir bien requiere de disciplina y auto conocimiento. Prestar atención a todos los elementos que aportan para poder disfrutar de un sueño reparador es clave; recordemos que pasamos alrededor de un tercio de nuestra vida durmiendo, por lo que es una actividad tan importante como alimentarse o hacer ejercicio.